CÓMO INFLUIR EN TUS COMPAÑEROS: ESTOY GANANDO, PERO NO AVANZO
Es común en muchos entornos corporativos que exista competencia entre individuos o equipos. En muchos casos, si se trata de una competencia sana, puede ser útil y hacer que todos sean mejores. Desafortunadamente, cuando ocurre una competencia poco saludable, puede llevar a que una persona o equipo intente ganar a expensas de otra persona o equipo. Esto puede llevar a la ira, la animosidad y la confusión en los que trabajar juntos de manera productiva ya no es posible. Puede que esté ganando, pero no está progresando hacia las metas y los resultados más amplios que desea.
Pasar de competir a completar
La característica más notable de los compañeros que completan frente a competir es su forma de pensar. Las personas que “completan” tienen una mentalidad de abundancia, mientras que las personas que “compiten” tienen una mentalidad de escasez. Una mentalidad de abundancia es cuando alguien cree que hay mucho espacio para otros; si ganas, no me quita nada. Una mentalidad de escasez cree que solo hay espacio suficiente para mí, y si yo gano, tú pierdes. Los compañeros de equipo con mentalidad de abundancia desarrollan influencia a través de la colaboración y agregando valor a los demás.
Pero, ¿qué hay de mí?
Hace varios años, me encontré en un equipo que constaba de cuatro líderes fuertes y capaces, cada uno de los cuales tenía su propio historial de liderazgo de equipos. Todos éramos compañeros y todos reportábamos al mismo jefe. Cada uno tenía un papel, pero cada uno podía hacer el papel de los otros tres. Situaciones como esta a menudo pueden generar una mentalidad de escasez, con cada persona haciendo lo que sea necesario para autopromocionarse y verse mejor que los demás. Pero eso no es lo que pasó.
Cada uno de los cuatro entramos en esta situación con una mentalidad de abundancia. Cada uno de nosotros respetó las habilidades y la capacidad que los demás aportaron al equipo, y todos reconocimos la oportunidad que teníamos de aprender unos de otros. Esto es lo que hicimos para que esto sucediera:
– Nos tomamos el tiempo para conocer las fortalezas y debilidades de los demás.
– Nos incluimos en la planificación del trabajo, aprovechando fortalezas y debilidades
– Dejamos que gane la mejor idea
– Ponemos a la organización y al cliente por delante de las personas
– Confiamos el uno en el otro
– Evitamos discusiones mezquinas y políticas de oficina.
Problemas con los compañeros
Si desea aumentar su nivel de influencia con sus compañeros, debe tomarse el tiempo para comprender quiénes son y qué aportan al equipo. Luego, puede encontrar formas de agregarles valor y aumentar el impacto de su equipo. En Las 21 leyes irrefutables del liderazgo, John nos da la Ley de la significación, que dice que uno es un número demasiado pequeño para hacer algo significativo. No vas a tener éxito a menos que mucha gente quiera que lo tengas. Si tiene poca o ninguna influencia con sus compañeros, tendrá dificultades para lograr ganancias significativas para su equipo y organización.